Los fócidos, como también son conocidas las focas, son animales que pasan la mayor parte del tiempo en el agua y es donde buscan su alimento. Tienen la capacidad de sumergirse a profundidades de más de 600 metros, como es el caso de la foca de Weddell (Leptonychotes weddellii) y de nadar largas distancias para capturar a sus presas, aunque otras prefieren mantenerse a profundidades de no más de 4 metros para buscar alimento.
(Mariá L, 2020)